Es cierto: tu bebé es absolutamente hermoso y probablemente el humano más pequeño y dulce que haya nacido, pero incluso los bebés más impresionantes necesitan un poco de aseo de vez en cuando. Y, como ya te has dado cuenta, los recién nacidos no vienen con manuales, por lo que hemos reunido algunos consejos de expertos para que tu bebé se vea (¡y se sienta!) lo mejor posible. Todo sobre el cuidado de un recién nacido Has pasado por el embarazo y el parto, ahora estás lista para ir a casa y comenzar la vida con tu bebé. Sin embargo, una vez en casa, puede que sientas que no tienes idea de lo que estás haciendo. Estos consejos pueden ayudar a los padres primerizos más nerviosos a sentirse seguros de cuidar a un recién nacido en muy poco tiempo. Lactancia Al principio, puede parecer que no está haciendo nada más que alimentarse, pero gradualmente tú y tu bebé entrarán en un patrón y la cantidad de leche que produzcas se asentará. Alimenta a tu bebé tan seguido como lo deseen. Esto se llama alimentación dirigida por el bebé. Deja que tu bebé decida cuándo ha tenido suficiente. Baño No necesitas bañar a tu bebé en los primeros días. Es posible que prefieras lavarle la cara, el cuello, las manos y la parte inferior con cuidado. Elige un momento en que tu bebé esté despierto y contento. Asegúrate de que la habitación esté caliente y prepara todo de antemano. Necesitarás un recipiente con agua tibia, una toalla, algodón, un pañal limpio y, si es necesario, ropa limpia. Cambio de pañales Los bebés necesitan muchos cambios de pañales, pero la frecuencia con la que necesitan cambiarse depende de qué tan sensible sea su piel. Algunos bebés tienen una piel muy delicada y necesitan cambiarse tan pronto como se mojan, de lo contrario, su piel se vuelve irritada y roja. Otros bebés pueden esperar a ser cambiados hasta antes o después de cada alimentación. Todos los bebés necesitan cambiarse lo antes posible cuando hayan hecho una caca (heces) para prevenir la erupción del pañal. Hora de dormir Es normal que los bebés recién nacidos duerman solo de dos a tres horas a la vez durante la noche y durante el día. Una razón es que los bebés recién nacidos todavía no están “sintonizados” con el día y la noche. Los bebés también crecen rápidamente en los primeros meses y tienen estómagos muy pequeños. Esto significa que necesitan alimentarse poco y con frecuencia. A medida que tu bebé crezca, comenzará a necesitar menos comidas nocturnas y dormirán más tiempo durante la noche. Tener conocimiento de todos estos datos puede facilitar la vida de los padres primerizos. Pero si lo que realmente quieres son soluciones y tiempo libre, consigue una caja del hogar “Bienvenido al mundo”. Son múltiples lo servicios a los que pueden acceder los padres, desde limpieza del hogar, manicura a domicilio, servicios de canguro, etc. Compra ya la caja “Bienvenido al mundo” y sorpréndete con soluciones para tu hogar y el bebé.
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